Las fuerzas de la naturaleza han sido siempre algo que ha atraído poderosamente la atención del hombre: Estudiar las corrientes marinas, medir la velocidad de los distintos vientos, observar la tierra, las plantas y sus ciclos, descubrir y dominar el fuego. Establecer paralelismos entre algunas actividades humanas, entre ciertos sentimientos, y entre las pasiones más arraigadas en el hombre y los elementos de la naturaleza, ha sido una de las tareas principales (y más gratificantes) de este discreto, pero ambicioso, poemario.
Las fuerzas de la naturaleza han sido siempre algo que ha atraído poderosamente la atención del hombre: Estudiar las corrientes marinas, medir la velocidad de los distintos vientos, observar la tierra, las plantas y sus ciclos, descubrir y dominar el fuego.
ResponderEliminarEstablecer paralelismos entre algunas actividades humanas, entre ciertos sentimientos, y entre las pasiones más arraigadas en el hombre y los elementos de la naturaleza, ha sido una de las tareas principales (y más gratificantes) de este discreto, pero ambicioso, poemario.